¿Por qué ir a Terapia Energética?
Intro
Cada vez se sabe que hay más personas probando algún tipo de terapia energética, y no es tanto por tendencia, sino porque obtienen beneficios a nivel físico, pero también a nivel de emociones y mente para un desarrollo personal.
Si nunca has tenido una sesión y tienes dudas, aquí respondo a las preguntas más comunes para que puedas decidir si te hace sentido probar con una terapia energética o no.
¿Por qué ir a terapia energética?
Un buen motivo para probar una terapia energética, es sentir u observar que hay algo que no está funcionando como debería a pesar de que pones de tu parte, un problema sin lógica y que no encuentras solución por medios tradicionales y que te interesa mejorar.
También se vale probar por curiosidad, pero con apertura a la posibilidad de crear un cambio para bien; porque al hacerlo con escepticismo bloqueas el trabajo energético (suponiendo que el terapeuta respete tu libre albedrío).
Otra opción es complementar un tratamiento médico con terapia energética, ya que nuestro cuerpo energético es un área que no toca la ciencia tradicional.
¿Cuándo se recomienda ir a terapia energética?
Dentro de las razones más frecuentes donde se recomienda probar con la terapia energética son:
Problemas emocionales persistentes que no se han resuelto con terapia convencional, o que han surgido de la nada y con fuerza.
Sensación de “estar drenado” sin importar cuánto se descanse y sin causa médica aparente.
Dolores o enfermedades por factores emocionales o mentales, que no mejoran con tratamientos médicos.
Sensación de vacío existencial, un sentir que se está pero sin rumbo ni propósito de vida.
Búsqueda de conexión espiritual más allá de la religión.
Sensación de haber “perdido el rumbo” y falta de claridad para tomar decisiones.
Problemas recurrentes con parejas, familia, trabajo, etc.
Necesidad de limpieza energética por la sensación de estar con “carga negativa”.
Buscar equilibrio entre mente, cuerpo y espíritu para un enfoque holístico de salud.
Deseo de integrar experiencias místicas a la vida cotidiana.
¿Cuál es la mejor terapia energética?
La mejor terapia energética que conozco es la que más resuena contigo… de verdad; por ejemplo, si a ti no te llama la atención hablar de ángeles, no te va bien ir a una terapia de ángeles; si te abruman los sonidos constantes, no vayas a una terapia vibracional (al menos al principio).
Y es que no existe una terapia mejor que otra, cada terapia tiene sus propias técnicas y enfoques para canalizar la energía para el beneficio del otro; de ahí que la que más resuene contigo y la que se especialice en algo que tú necesites, va a ser la mejor terapia energética para ti.
También te recomiendo buscar terapeutas que te ayuden a conocerte, a ver tu área a trabajar, para que la sesión energética no solo te ayude con tu problema, sino también a tu desarrollo personal.
¿La terapia energética es magia blanca?
He aquí la cuestión, porque no es lo mismo pero se confunde.
En pocas palabras, la magia blanca ofrece resultados rápidos, ya que el enfoque está en el manejo de energías más cercanas a lo mundano y que afectan la materia de forma más pronta sin que tengas que hacer ningún cambio a nivel interno.
En cambio, la terapia energética toma tiempo porque el enfoque está en el manejo de energías de planos superiores y que toma tiempo “incorporar” al plano físico; aquí los cambios se aceleran si pones de tu parte para resolver el problema a tu favor.
Sutil pero gran diferencia.
“El cuidado y desarrollo de tu ser, es la verdadera magia para transformar tu mundo y de aquellos que te rodean”
Por ejemplo; supongamos que tienes problemas en tu vida amorosa y lo quieres resolver usando “trabajo energético”, así se resolvería según qué herramienta:
Magia blanca.
Te recomendarían hacer un endulzamiento o amarre para que la persona amada vuelva a interesarse en ti y salvar tu relación (porque amor es amor y todo sea por vivir en amor).
Pros: tu pareja vuelve a mostrar interés en ti, todos felices y contentos y “no hiciste daño a nadie”.
Contras: el efecto de felicidad es temporal (porque la energía está en constante movimiento), controlaste la energía de otro infringiendo las leyes de libre albedrío, cambiaste amor por posesión, desviaste tu camino y proceso evolutivo y el de la otra persona.
Terapia Energética.
Se accede a la información que te está afectando en tu relación de pareja, se limpia la energía densa que has acumulado y se te dan pautas a seguir para mejorar, (porque los cambios profundos empiezan de adentro hacia afuera).
Pros: tu caos emocional y mental se calma, descubres y comprendes cuál fue el detonante real de tu situación, y pones de tu parte para enmendar los hábitos que te causan distorsiones energéticas en tu vida de pareja.
Contras: tu pareja puede seguir sin mostrar un pelo de interés en ti y feliz en lo suyo (a menos que esté en el camino y proceso evolutivo de ambos seguir juntos); y si querías resultados rápidos sin poner de tu parte, lo verás como una estafa que no dio resultados.
¿Es la terapia energética pseudociencia?
El afirmar que la terapia energética es pseudociencia, es en otras palabras decir que es “una mentira, falso o engañoso”, según la etimología de la palabra pseudo; algunos lo valoran así, por la falta de evidencia científica acerca de la energía del cuerpo y que las terapias energéticas no cuentan con estudios clínicos rigurosos que respalden su eficacia.
Y es cierto, no se ha podido aplicar un método científico porque:
No existe aún la tecnología para medirlo y replicar los resultados de manera consistente (se está intentando con la física cuántica).
Se necesitaría que algún científico le interese, aporte su tiempo y recursos económicos para este estudio, corriendo el riesgo de ser desacreditado o hasta su posible expulsión del gremio (lo intentó Jacobo Grinberg).
Encontrar a un grupo de personas con habilidades psíquicas similares que se presten para estudios y pruebas de medición (como pasó con el proyecto Stargate de la CIA).
Conclusión
No necesitas "estar mal" para tener una terapia energética; a veces basta con querer armonizarte y/o entenderte mejor desde un lugar más consciente.
Una terapia energética no es para huir de la realidad, o para poner el problema fuera o crear un efecto placebo; es una experiencia donde ocurren cambios de percepción, toma de consciencia y la sorpresa de sincronías que acompañan un proceso de transformación.
Basta con observar nuestro entorno para darnos cuenta de la dinámica que existe en nuestra realidad a un nivel básico de polaridades: luz y oscuridad, día y noche, frío y caliente, alto y bajo, femenino y masculino, positivo y negativo, físico y... ENERGÉTICO.
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